Después de cursar estudios de publicidad y dedicarme durante varios años al diseño y marketing fuera de nuestro pueblo, regrese a mis raices y me encontré con una construcción casi en ruinas, insoportable a la vista y que arañaba mi corazón.
Desde ese momento tuve claro que tenía como meta recuperar nuestro patrimonio, para que las nuevas generaciones pudiesen tener testimonio vivo de la cultura agrícola del sur de Andalucía.
Tras más de una década trabajando duro y sin descanso hemos conseguido levantar de nuevo el Molino. Devolviéndole parte de su esplendor y hermosura. Manteniendo vivo el legado que nos transmitieron nuestros antepasados
A través del proyecto “Ruta del Olivo” pretendemos dar a conocer entre todos los públicos, la cultura del aceite, uno de los ejes fundamentales de la economía andaluza. Nuestras instalaciones, ubicadas en Molino jabonero, están compuestas de: cortijo, almazara tradicional, molino harinero, acueducto y mesón. Todas se integran en un marco de excepcional encanto, reconocido como patrimonio etnográfico andaluz, y bien de interés cultural. Situadas a la orilla del río Guadalhorce, muy cerca de su nacimiento, y al pie de la sierra de San Jorge.
Molino Jabonero nace entonces como alojamiento rural, mesón y museo. Desde entonces se ha convertido en uno de los atractivos turísticos más importantes de la comarca Sierra Norte de Málaga. Punto de partida de la ruta senderista de los 100 Caños, con su especial encanto que atrae cada año a cientos de visitantes.
En la actualidad el Molino cuenta con piscina, mesón rural con capacidad para 50 comensales, salón privado de usos múltiples, patio central, con almazara y molino de harina, de 500 m2, ideal para todo tipo de celebraciones, 6 habitaciones dobles en su alojamiento y un apartamento diáfano de 6 plazas.
En sus orígenes el molino era una fábrica de aceite y ese es el punto de partida para el desarrollo de un nuevo proyecto que pretende convertir a Molino Jabonero en un referente del oleoturismo en la provincia de Málaga
Por ello hemos restaurado por completo nuestra almazara del siglo XIX del tipo de capachos, con tres rulos, batidora, dos prensas y dos bombines de presión. Con ella es posible ver en vivo el funcionamiento de esta ingeniería, que en su momento funcionaba indistintamente con la fuerza del agua del río Guadalhorce o con un motor de explosión.
En la actualidad no hay otra experiencia de este tipo en toda la provincia, siendo nuestra almazara una de las pocas que siguen funcionando en toda Andalucía, con las piezas originales , en su ubicación tradicional
Este desarrollo empresarial es posible gracias a la sinergia con el proyecto: Aceite de Oliva Virgen Extra 100 Caños. Aceite elaborado a partir de aceitunas recogidas de nuestra finca.
Es nuestra intención colaborar con las instituciones académicas (colegios, institutos y universidad) para que la cultura del aceite sea cada vez más reconocida y valorada desarrollando proyectos de investigación.
Queremos convertir a Villanueva del Trabuco en punto de visita obligado para todo amante de la naturaleza, la gastronomía y la salud a la par que desarrollar un proyecto social y cultural pionero en la zona.
